La venganza de los pixeles

Los pixels han clamado venganza, y en el último vídeo podemos ver qué pasaría si se revelasen. Cansados de que se les quiera perder de vista entre tanta HD y tanto filtro, anti-aliasing entre otros, han dicho basta. Los hemos despreciado, el HAMOR que les teníamos antaño ha desaparecido con tanto fotorealismo y resoluciones que hacen que nos riamos sin corazón de aquellos 320x240...

Cada pixel tenía su personalidad, eran pocos, todos se conocían, podías ver a todos y cada uno de ellos moverse por la pantalla con profesionalidad y una alegría sin igual.

Los más jóvenes tenían color propio, aunque otros que ya peinaban canas sufrían aún las transparencias de antaño. Valían para todo.

Todos tenemos la culpa, esta venganza liderada por los grandes de los 8-bits nos debe hacer recordar que la impersonalidad de los pixels de hoy en día hace que la muerte de uno sea prácticamente imperceptible, morir y que nadie se de cuenta, triste vida. Antes cuando los píxeles morían era un drama. Intentabas reanimarlo, buscabas más por si se trataba de una epidemia apagabas y volvías a encender para que descansase con la esperanza de que el pobre pixel volviese en sí. Pero no, había pasado, se te había muerto un pixel. Algo que en aquella época habríamos contado en Facebook, Twitter y hasta en nuestro Blog. "Hoy se me ha muerto un pixel", empezaría la entrada.

Por todo esto, recapacitemos, pensemos en ello, glorifiquemos a aquellos pixeles que nos hicieron disfrutar tanto o cuando nos queramos dar cuenta será demasiado tarde... y se revelarán: